Y entonces aparece Él, flotando con su magia sin nombre entre bits y bytes, con su cansancio del guerrero tras la batalla, con la sonrisa de quien llega a casa, trayendo consigo…
Y entonces aparece Él, flotando con su magia sin nombre entre bits y bytes, con su cansancio del guerrero tras la batalla, con la sonrisa de quien llega a casa, trayendo consigo…